Trabajo de titanes. Hoy el grueso del equipo se ha
concentrado en la zona 5, al pie del muro oeste de la fortaleza ibérica, en la
ambición de retirar el derrumbe de inmensas piedras (por lo mismo llamadas
ciclópeas) que un tiempo se sostuvieron orgullosas para dominar el valle.
Nuestros cíclopes modernos Julián, Paco, los dos Antonios, Juanjo, “Bobis”, Mónica y Luisa,
bajo la supervisión de quien escribe (Eduardo), han despejado gran parte del
derrumbe, confirmando de paso que se conserva al menos una hilada completa de
uno a otro extremo de dicho muro, y en algunos puntos hasta tres hiladas de
piedras, todas ellas de un tamaño colosal, obra sin duda propia de cíclopes.
A media mañana hemos recibido la visita de Paco,
espeleólogo, Rafa Carmona, experto medievalista y director del museo de Priego
de Córdoba, y Lola Luna, arqueóloga también prieguense quien ha colaborado con
nosotros en el Cerro de la Cruz, quienes han podido consultar la cerámica
medieval más representativa excavada hasta el momento.
Poco después, durante la pausa “del bocadillo”, que hacemos
cada mañana, ha habido una colorida novedad. Entre los miembros del equipo se
había “filtrado” la noticia de que ese día Antonio Moreno cumplía años. En un
momento dado, y aprovechando el desconcierto de la parada del trabajo, Fernando
ha aparecido con una tarta sobre la que había dos grandes velas en las que se
podía leer la cifra “18”, edad aproximada de Antonio según nuestra estimación
no del todo rigurosa.
Cerca ya del final de la mañana recibimos la visita de Lola,
arqueóloga, y Rafa Martínez, experto en análisis óseos de fauna animal. Gracias
a su versada mirada, hemos podido identificar preliminarmente algunos de los
huesos hallados en los niveles ibéricos del yacimiento.
El final del día, sin embargo, ha sido bastante tortuoso.
Durante el descenso del cerro, Rafa Martínez nos hablaba de cerámica de la Edad
del Bronce. La concentración que exigía el tema iba en detrimento de su
atención al camino, y quizá por eso ha resbalado en la pendiente y se ha hecho
un corte importante en una mano. Nada que temer, el botiquín que traemos cada
día al yacimiento contaba con todos los medios para atajar la hemorragia y
proveer de los primeros auxilios. Un par de cervezas en el hotel han
complementado el tratamiento de la herida, de la que esperamos se recupere
rápidamente.
Foto 1. Eduardo concentrado sobre el perfil de la zona 5.
Foto 2. Paco, Rafa Carmona y Lola Luna atienden a las
explicaciones de Fernando. A la derecha Laura, Antonia y Juanjo.
Foto 3. Antonio recibe, algo aturdido por la sorpresa, la
tarta de cumpleaños.
Foto 4. Rafa Martínez analiza los restos óseos hallados en
excavación.