martes, 25 de septiembre de 2012

Martes 25 de Septiembre. Se aproxima el final



Como os decíamos el otro día, uno sabe que se aproxima el final de la campaña de excavación por una contracción relativista del tiempo. En realidad, por más cosas: se multiplican las visitas, el clima deja de acompañar, y sobre todo las cosas se ponen realmente interesantes. Es como los llamados ‘cliffhanger’ de las series de televisión, Juego de Tronos por ejemplo (que nos encanta a muchos por aquí). Es cuando un capítulo termina con un giro imprevisto de la trama, algo que nos deja inquietos y deseando que llegue la semana siguiente para ver cómo se resuelve la situación. Pues eso está ocurriendo en el Cerro de la Merced. En la Zona 2, al norte y al exterior del recinto cuadrado, se alcanza la roca madre y aparece una unidad estratigráfica con tierra negra que solo contiene cerámica tosca a mano, casi con seguridad de la Edad del Bronce. En la zona 5, al Oeste, parece que se define un suelo de uso ibérico en la base exterior del muro del recinto,  a una cota casi coincidente con el nivel del norte, lo que sugiere interesantes implicaciones sobre lo que se hizo en la cima del cerro a la hora de planificar el gran cuadrado fortificado.
Pero sin duda lo más interesante del día ha sido confirmar que el gran murallón norte tiene cara interior, dando un grosor de muro de… ¡algo más de dos metros’. Además, aparece otro muro adosado por el interior (o quizá al revés), posiblemente con zócalo de sillarejo de buen tamaño. Sobre esos muros se derrumbó la estructura de adobes que comentábamos ayer… en fin, que más interesante no puede estar la cosa. Pero ahora no es el momento de enloquecer y de dejarnos llevar por el entusiasmo, sino de actuar con calma y frialdad, dando prioridad a la conservación de lo hallado ante la llegada del invierno que se aproxima… Tiempo habrá de seguir excavando.
Foto 1. Lucía es nuestra restauradora. Por las tardes, somete a las piezas delicadas, particularmente las metálicas, a una limpieza preliminar y, si es necesario, consolidación de campo. Es un lujo poder contar con una especialista directamente en el campo. Mañana a a comenzar a examinar los musgos que cubren los muros ciclópeos que estaban visibles y expuestos a los elementos desde tiempo inmemorial.
Foto 2.  Una vez lavada la cerámica, se sigla como veíamos ayer. En paralelo, “Control de Bolsas” realiza un inventario preliminar muy detallado  en una Base de Datos diseñada al efecto que forma parte de un sistema de Bases de Datos relacional que enlaza con las Bases de “Control de Unidades Estratigráficas” y “Control de piezas” individuales. Aquí vemos a las responsables del inventario preliminar, Mercedes y Mónica,  en plena faena.
Foto 3. Vista desde arriba de la imponente mole del muro septentrional del recinto interior y más masivo.
Foto 4. Antonia y Antonio –que han trabajado con entusiasmo y destreza tanto cuando hacía falta pico como cuando la herramienta a usar era la palustrilla-. han localizado cerámica a mano muy antigua entre las grietas de la roca base de un cerro, en un nivel posiblemente arrasado cuando se construyó en gran recinto.

lunes, 24 de septiembre de 2012

Lunes, 24 de Septiembre. Nubarrones a la vista



Se avecinan nubarrones negros a la excavación. Y lo decimos literalmente. La mayoría de  los pronósticos indican lluvias intensas o muy intensas y prolongadas para la segunda parte de esta semana. Y eso es algo muy malo, sobre todo si se produce justo al final de una campaña de excavación. Una tormenta intensa pero breve, vale. Un calabobos, molesto pero se puede asumir. Pero días seguidos de lluvia intensa pueden ser muy dañinos. Por un lado, porque convierten el yacimiento en un cenagal, en el que es imposible excavar: la limpieza de los cortes es esencial, y simplemente no se ve nada. Además, los perfiles pueden desmoronarse. Para colmo, si las lluvias continuas se producen  al final de la excavación, que es cuando se realizan la mayoría de los trabajos de limpieza, fotogrametría, dibujo y demás,  pues es un problema. Estamos tomando las medidas razonables para proteger las estructuras excavadas, pero el final de la excavación puede complicarse. Veremos.... ¿pasaremos del calor tórrido directamente al diluvio? Solo pedimos cuatro días de tiempo razonable de comienzos de otoño. Todos miramos al cielo rogando que no llueva, sólo estos días.... Esto parece Semana Santa.

1.- El sábado, aunque no trabajamos en el campo, sino en el laboratorio, tuvimos el placer de acompañar a un grupo de nuevos amigos. Muchos les conoceréis, ya que forman parte del Consistorio como concejales: Miguel Güeto, Antonio Caballero y Manuel Alguacil, a quienes acompañaba una vez más el infatigable responsable del Area de Cultura, Javier Ariza, quien a estas alturas es ya un experto en el yacimiento. Miguel subió además acompañado de su hermano y sobrinos, visitantes llegados por unos días de tierras catalanas. Todos quedaron impresionados por la magnitud que va tomando el recinto fortificado y el avance sostenido del trabajo. Como veis, el Ayuntamiento en pleno va subiendo al Cerro cuando lo permiten sus obligaciones, y eso es algo de lo que estamos muy orgullosos porque demuestra la implicación colectiva de Cabra en el proyecto.

2.- Laura y Tamara, arqueólogas y voluntarias egabrenses “siglando” el material. Al comienzo del blog os comentábamos que a veces hay que comprar cosas peculiares, como laca de uñas. Hoy os contamos que se trata de un producto inocuo para los materiales cerámicos, barato y práctico, que sirve para aplicar una leve película de apenas unos milímetros de largo en un lugar discreto de cada fragmento, sobre la que se escribe con un finísimo rotulador la ‘sigla’, un código que indica la procedencia exacta de la pieza, y a partir del cual cada tiesto de cerámica queda identificado por una suerte de DNI que nos informa, a nosotros, al Museo y a los arqueólogos del futuro, de la Unidad Estratigráfica de la que procede, el día en que se extrajo, etc.

3.- Vamos preparando el fin de la campaña. Alejandro va llenando de tierra sacos que, junto con grandes lonas de fibra geotextil, protegerán lugares delicados de la excavación hasta la reanudación de los trabajos de campo el año que viene. Sin embargo, no paramos la investigación, que ahora, durante el Curso Académico y el otoño.invierno, se desplaza a la Biblioteca y al laboratorio. Hay mucho por hacer.

4.-Mónica prepara los datos necesarios para tomar una foto de un gran derrumbe de un muro de adobes en el interior del recinto. Calculando su inclinación podemos saber desde dónde cayó la pared, y con el número de hiladas y su grosor es posible estimar su altura original.

viernes, 21 de septiembre de 2012

Viernes, 21 de Septiembre. El tiempo se echa encima…

Las excavaciones arqueológicas sufren de un fenómeno relativista. El tiempo se acelera a medida que transcurren las semanas,  y al final se comprime de tal modo que parece que no va a dar tiempo a hacer todo lo que deseamos. Llevamos ya tres semanas de trabajo intenso y todavía es mucho lo que queremos hacer. Las excavaciones se complican siempre, y ni por la mañana en el campo ni por la tarde-noche en el gabinete damos abasto para tanto que deseamos hacer.  Es evidente que una campaña de excavación en un yacimiento de esta entidad no es suficiente para resolver sus numerosos problemas, arqueológicos, históricos, de conservación y patrimoniales, pero parece voluntad de todas las instituciones implicadas, desde el Ayuntamiento a la Delegación de Cultura de la Junta de Andalucía, colaborar activamente para que podamos realizar los trabajos con el cuidado y dedicación que requiere el caso, empleando el tiempo que sea necesario. 

Mañana sábado nos dedicamos a trabajo de Gabinete, y nos concedemos unas breves vacaciones de Blog. Nos vemos el lunes.


Foto 1. Entre las numerosas visitas del día, destaca la de tres generaciones de ‘Julián García’, abuelo, padre e hijo. A todos nos ha pasmado (y nos ha dado envidia)  la agilidad con que Julián García senior, a sus ochenta y dos años, ha trepado al cerro  y se ha movido por los cortes de la excavación.  Julían, además de Catedrático de Latín y Cronista Oficial de Cabra, fue alumno de Antonio Blanco Freijeiro, maestro de toda una generación de catedráticos de Arqueología;   y además compañero de fatigas de Manuel Bendala en las excavaciones de la Casa de Mitra en 1972. Bendala fue a su vez  discípulo de Blanco, maestro nuestro y una figura muy influyente de la Arqueología española de las últimas décadas. Julián nos ha proporcionado interesantes detalles de viejas actuaciones en el Cerro de la Merced.

Foto 2.  Hemos llegado a la base del muro norte, que tiene cierta complejidad estratigráfica. Como se ve, los grandes bloques ciclópeos se asientan sobre una base bien endeble.


Foto 3. El análisis de los fragmentos de cerámica en su contexto preciso es esencial en el análisis estratigráfico. Cuando determinada pieza, por modesta que sea, puede ayudarnos en las tareas de datación y análisis, es fotografiada in situ antes de retirarla del sedimento.
Foto 4. También nos ha visitado de nuevo nuestro compañero de fatigas de muchos años en las excavaciones del Cerro de la Cruz, relacionado cronológicamente con éste, Ignacio Muñiz, Director del Museo de Almedinilla. A su lado aparece otro compañero de trabajo de casi veinticinco años en el Cerro de la Cruz, Emilio  Ruiz Cabello. No os dejéis engañar por su gesto perplejo ante las complejidades estratigráficas de la Zona 2 y  de la cimentación del muro septentrional. Emilio es un veterano excavador con gran ojo clínico.

Foto 5. Todas las tardes se pone el sol mientras seguimos trabajando en el Gabinete. De derecha a izquierda a lo largo de las paredes de la habitación, y en sentido contrario a las agujas del reloj, se afanan ya casi de noche cerrada Mercedes y Mónica (Control de Materiales e inventario preliminar); Luisa y Antonia (Dibujo);  Eduardo y Antonio (éste último momentáneamente ausente) (Control de Unidades Estratigráficas); Lucía (Restauración de campo); Antonio, Laura y Tamara (siglado). Detrás de Tamara aparece la sección de Fotografía. Como decía hace ya muchas décadas el ilustre arqueólogo británico Max Mallowan (conocido además por ser el marido de Agatha Christie e inspirador de muchas de sus novelas y de una deliciosa autobiografía), ‘en Arqueología nunca se tienen suficientes mesas de trabajo’. 

Foto 6.- También hemos recibido, por segunda vez en una semana, la visita de miembros de la Policia Autonómica de Andalucía, a quienes hemos expresado nuestra preocupación por la conservación del yacimiento, que pese a estar vallado y ser propiedad municipal, siempre corre peligro de actuación de excavadores clandestinos. La amabilidad de los oficiales de policía y sobre todo su deseo y voluntad de ayudar a proteger el Patrimonio de todos es encomiable.



jueves, 20 de septiembre de 2012

Jueves 20 de Septiembre. Cimentar o no cimentar, esta es la cuestión.



Esta mañana hemos llegado a la base del muro norte, que tiene peculiares características, básicamente la falta de una cimentación digna de tal nombre (algo muy ibérico, por otra parte, como ocurre por ejemplo en Puente Tablas, en Jaén).
Lo de la cimentación tiene su aquel. Es una palabra adecuada en edilicia, pero también se aplica en Ciencia. Cimentar una hipótesis es algo muy distinto a especular, como muy bien saben los científicos ‘duros’ (físicos, químicos, etc.) que cuando se ponen estupendos delante de una cerveza niegan a menudo el carácter científico a disciplinas humanísiticas.
La Arqueología, siendo una disciplina histórica, es de las más ‘hard’ ya que aplica numerosas técnicas tomadas de las Ciencias duras. Pero además, y conceptualmente, el arqueólogo debe constantemente estar ‘maquinando’ en el campo, pensando, construyendo y desechando posibilidades, porque a medida que excava va destruyendo su ‘experimento’ como ya explicábamos hace unos días. Y eso plantea un problema.  Primero, porque es fácil confundir esa constante dialéctica con las Unidades Estratigráficas, ese ‘esto puede ser’ con una hipótesis, que no lo es.  Y segundo, porque una actitud en exceso inductivista (dejar que las piedras hablen por sí mismas) puede llevar a que las piedras no nos hablen en absoluto, terminemos la excavación, hayamos retirado los sedimentos, y no hayamos entendido nada. Pero el peligro opuesto es incluso más peligroso: convertir  ese trabajo intelectual (a veces difícil en las condiciones de calor y cansancio del campo)  en la generación de una ‘teoría favorita’, que con mucha facilidad puede llevarnos a hacer que las piedras digan lo que queremos que digan, porque nuestra hipótesis favorita arrastra nuestra voluntad. En fin….  que esto es complicado.

Foto 1.-Antonio Bobis se está pegando una paliza monumental levantando y moviendo piedras del derrumbe oeste, pero también le ha cogido rápido el tranquillo al pico, y lleva el corte casi como una patena. Un excelente trabajo.
Foto 2.- La hora del bocadillo es sagrada, y todos nos refugiamos como podemos bajo la escasa sombra. A todos nos asombra que Luisa siga de pie y al sol mientras come. ¡Qué resistencia!
Foto 3.- Seguimos con visitas, siempre agradables. En este caso, junto a ‘la Dirección’ aparece nuestro amigo Angel Ventura, de la Universidad de córdoba, siempre fuente de amena conversación académica (en el campo o con un choricito en Los Pelaos) y un  constante chorro de ideas.
Foto 4.- Pues puede que después de todo nuestro muro exterior en el lado oeste no sea medieval… seguiremos informando.


miércoles, 19 de septiembre de 2012

Miércoles, 19 de Septiembre. Día movidito


Hoy ha sido un día movidito con  un desagradable incidente inicial en un cortijo inmediato al yacimiento, que ha requerido la intervención de la Guardia Civil y que lógicamente ha alterado bastante el ritmo intenso pero a la vez curiosamente pausado  y concienzudo del trabajo. Por otro lado, hemos tenido dos numerosas visitas previamente planificadas, que han recorrido el yacimiento en detalle atendiendo atentamente a las explicaciones que les hemos dado. A primera hora han llegado el Inspector de la excavación, Alejandro Ibáñez, que acompañaba al Gerente del GDR (Grupo de Desarrollo rural) de la Subbética, Francisco Mérida. Mercedes y Eduardo les han explicado el desarrollo de los trabajos. Su colaboración está siendo y será esencial y muy bienvenida.  Poco después llegó el otro grupo que esperábamos, una visita de buena parte de la Corporación Municipal de Cabra, con su alcalde al frente. Antonio les ha ofrecido una visita completa y ambos grupos han compartido impresiones durante un buen rato. También vino un rato a primera hora Ignacio Muñiz, del Museo de Almedinilla y nuestro colega y compañero estos años en las excavaciones del Cerro de la Cruz.
Más tranquila está siendo la tarde, dedicada siempre al inventario y estudio preliminar de los materiales. No siempre se tiene en cuenta –ni siquiera por las autoridades administrativas que gestionan fondos , y ni siquiera por algunos arqueólogos- que por cada hora de trabajo de campo, un equipo de investigación deberá dedicar al menos otra de trabajo preliminar en la propia campaña, y luego otras muchas más de estudio sistemático y detallado.

Dicho de otra manera, y como regla de andar por casa, cada mañana de trabajo de campo debe ir acompañada de un tiempo similar vespertino dedicado al trabajo inicial de limpieza, control e inventario, y cada campaña de excavaciones debiera idealmente ir seguida de otra, similar en tiempo y equipo, de estudio a tiempo completo de materiales en campo y gabinete. Y luego, otro tanto  de trabajo de biblioteca y laboratorio. No tener en cuenta estas necesidades a la hora de planificar y financiar es una de las principales razones por las que las excavaciones tarden a veces mucho más tiempo de lo razonable en publicarse como es debido… y no hablamos de unos años, sino incluso de décadas.


Foto 1.  Hoy nos ha visitado buena parte de la Corporación municipal de Cabra. De izda.  a dcha. vemos a Javier Ariza (Primer Teniente de Alcalde e impulsor principal del proyecto de investigación); Fernando Priego (alcalde de Cabra); Francisco Casas ( concejal de Turismo); Antonio  Moreno (que es el Director del Museo de Cabra, pero en este caso aparece, como miembro del equipo, acompañando la visita), Juan Ramón Pérez Valenzuela (Urbanismo) y Ana Peña (Hacienda). Agradecemos que hayan tomado tiempo del día laboral para realizar una evaluación in situ de nuestro trabajo. 
Foto 2. Alejandro Ibáñez (izqda.), de la Delegación de Cultura e Inspector de los trabajos de acuerdo con la normativa de la Junta de Andalucía, está tomando verdadero interés en nuestro trabajo y colabora en todo lo posible. Hoy nos ha vuelto a visitar acompañando a Francisco Mérida (Dcha), Gerente del GDR de la Subbética.  
Foto 3. La primera tarea de gabinete, por la tarde, es simple: los materiales ya vienen separados del campo (huesos, metal, etc.), y pre-clasificados. Por la tarde, se hace una foto general de trabajo de todo el material de cada bolsa y Unidad Estratigráfica, y parte del equipo procede a la tediosa pero necesaria tarea de lavar la cerámica, retirando con cepillo suave la tierra adherida y evitando mojar los materiales delicados. Es la primera fase del trabajo de inventario. Tomamos mucho cuidado para no mezclar fragmentos de distintas procedencias (por ejemplo, del relleno de un hoyo  de un topo y del terreno adyacente).
Foto 4. Este cráter o paisaje lunar en el centro del recinto interior es lo que dejan los excavadores clandestinos cuando, en su rebusca brutal,  codiciosa y egoísta de objetos para su disfrute o lucro personal, dañan el patrimonio de todos. Una verdadera lástima, ya que se pierde información muy valiosa que la excavación sistemática proporciona al ubicar los objetos en su contexto, destruye las estructuras en la frenética excavación de hoyos incontrolados, y hace mucho más lento y difícil nuestro trabajo científico.